Resulta que
uno de mis hijos tiene grandes habilidades en el uso de la magia.
Pensé en que se fuera contigo.
Para
que le enseñes a usar la magia.
¡Creo que podría llegar a ser un Ryuzoku muy importante!
¡Claro, cuenta conmigo! ¡Estoy entusiasmado por esta noticia!
Muy bien,
gracias. Entonces, queda a tu cargo.
Su nombre es Katattsu.